21 marzo, 2014

Niña, sólo niña...


Niña

Nombras el árbol, niña.
Y el árbol crece, lento y pleno,
anegando los aires,
verde deslumbramiento,
hasta volvernos verde la mirada.

Nombras el cielo, niña.
Y el cielo azul, la nube blanca,
la luz de la mañana,
se meten en el pecho
hasta volverlo cielo y transparencia.

Nombras el agua, niña.
Y el agua brota, no sé dónde,
baña la tierra negra,
reverdece la flor, brilla en las hojas
y en húmedos vapores nos convierte.

No dices nada, niña.
Y nace del silencio
la vida en una ola
de música amarilla;
su dorada marea
nos alza a plenitudes,
nos vuelve a ser nosotros, extraviados.

¡Niña que me levanta y resucita!
¡Ola sin fin, sin límites, eterna!

Octavio Paz 21mzo2014, día de la poesía.



La poesía siempre sedujo mi alma y mi respiración, pero si hubo un libro que cambiará mi perspectiva ante lo que es la poesía es Libertad bajo Palabra de Octavio Paz y que junto con El Arco y la Lira, me han enseñado que la poesía no se escribe como renglones chiquitos. Nace en la palabra, es el manejo de la imagen; el  trabajo que como fino orfebre el poeta hace de cada una de las palabras y sus sonidos, juega con ellos para engarzar un poema, en el cual, cada verso es vital, es un latido, cada verso es insustituible. 

Con estos dos libros aprendí que el trabajo del poeta es un oficio, que cada palabra hay que labrarla, golpearla y, algunas veces, con la rudeza del marro y el yunque para fraguar con ella nuevos sentidos, hacerle surgir nuevas imágenes. Labrar de la palabra lenguas de acero que sobreviven a la llamas y el hielo. En cada poema la palabra se viste de otra piel,adquiere nuevas alas y con ellas surca otros cielos.  

Cuando abrí este blog en el 2011, el propósito inicial era establecer diálogo poético con un poeta que admiro. Lo que nunca imagine es que estas breves entradas, a las que a veces les doy largos silencios, pudieran hacerme recuperar algo que creí perdido tras diez años de no escribir, y que ha sido la fortuna de volver a escuchar esa voz de la que hablaba Góngora, la "voz de la Musa que dicta rimas sonoras al que trabaja y escucha entre la tinta". Y así, este blog, poco a poco, se ha convertido en un espacio en que el espíritu ha ido curando sus propias heridas y las alas, aunque fracturadas, han comenzado a aletear un poco y a pequeños saltos, van recuperando esa capacidad para volar.

Es por esto que el día de hoy que se celebra el día de la poesía, yo quiero compartir con ustedes, este poema: Niña de Octavio Paz que ha sido un fuego abrasador que trastoco mi alma cuando tendría quizá once o trece años y que aún ahora, me conmueve profundamente. Quiero compartirles las palabras de este hombre, cuyas reflexiones de lo que es la poesía y el oficio de la palabra escrita me han guiado en la distancia, ya que sólo soy uno más de sus lectores, nunca me acerqué a él en vida, aunque sí asistí a algunas de sus conferencias.

El día de hoy también quiero agradecer a todos aquellos que tiene a bien seguirme en mi blog y que han hecho con sus lecturas, que cada entrada se convierta en un reto y en una reconstrucción de un espíritu que pensé quebrado para siempre. 

Muchas gracias por leerme, por los comentarios que me hacen, por seguirme e incluso establecer conmigo contacto en redes. Su lectura me anima a seguir escribiendo. 

Feliz día de la primavera y feliz día de la poesía.

Lucía de Luna, L´letraferit, Aitana Lúa.

2 comentarios:

  1. "Cuando la poesía surge, el Universo se vuelve mar, mi corazón se vuelve cielo" MDB
    Mil gracias amiga Lucia por compartir esta hermosa reflexión acerca de la poesía y de tu inquietud literaria.

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    1. Gracias a ti por leer y también por compartir esa mirada tuya que queda plasmada en la imagen de un instante congelado. Un abrazo y mi amistad de siempre.

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