El vaho de niebla deambula los jardines como mi respiración recorre
en sigilo los largos corredores de este vacío.
Las frías gotas matutinas
rebozan latidos pero no la mirada.
En este jardín ya no hay cantos de pajarillos
que reflejen eco de primavera o aquellos juegos de labios.
©Lucía
de Luna
Hay aire limpio
ResponderEliminarsecando ojos tristes
que lloran flores
(Tu lado, mi lado) [Hoy]
ResponderEliminarHoy dejaré de lado mi lado
para llegar todo lo próximo
que quieras, que alcance,
que sienta, sin roces:
a tu lado.
Hoy seré para ti aquel
que tú desees que yo sea
sin traicionar quien
yo quise ser:
por, para ti.
Hoy alcanzo tu lado fecundo:
Desde mi estéril,
mi inconcluso lado.
Hoy. Y nada más que
mi lado a tu lado.
Por evitar equívocos: esto lo escribí hace algún tiempo.
EliminarEl texto en sí, el sentimiento que encierra, no están destinados a una persona concreta, o tal vez sí, pero no necesariamente en este momento concreto.
Dicho esto, la ocasión, el momento escogido para colocarlo aquí, sí que tiene una destinataria específica y concreta.
En la película del Cartero de Neruda, el Cartero le dice a Neruda (tras haber usado sus versos para enamorar a una mujer) ¡que los versos no son de quien los escribe, sino del que los necesita! Me alegro Anónimo que estas líneas junto con tu mensaje hayan servido en este espacio como punto de encuentro para esa destinataria. Les dejo a ambos un saludo y no era necesaria la explicación del todo, así lo comprendí desde el principio y claramente, porque me conozco sé que no soy la aludida. Saludos y gracias por leer. Felicitaciones por su amor correspondido entre ustedes.
EliminarIba a comentar tu bellísimo post, pero me rindo.
ResponderEliminarEl comentario anterior al mío, deja en pañales cualquier halago.
Yo, en conciencia, no puedo decirte que te amo.
Me gustó tu micro, cargado de poesía.
Desde los ojos de un simple lector.
Un abrazo